ACCIDENTES DE AUTOS
Recién regresé de un viaje por algunos países europeos y me sorprendió que allá se haga tanta publicidad en prevención de accidentes de tráfico de automóviles y al mismo tiempo no se eviten las muchas circunstancias viales que pueden producirlos. Porque una cosa es que se reconozca la carestía de medios para mejorar las infraestructuras y otra muy distinta que parezca que se ignora las incorrecciones que generan los accidentes. Sin ser excesivamente crítico, me gustaría recomendar a continuación un listado de desajustes que yo aprecié, por si a alguien con responsabilidad le pudieran servir para evitar riesgos.Las campañas para concienciar parecen correctas para mejorar los hábitos, pero que las autoridades se responsabilicen por la prevención de los riesgos en los diseños de las vías, mucho más. No olvidemos que cada situación de riesgo implica a miles y miles de usuarios a través del tiempo y que evitándola se elimina toda posibilidad de accidente causada por ese deficiente diseño. Tampoco olvidemos que sobre las vías circulan muchos forasteros, quienes no esperarán encontrar lo que no es habitual en el resto de los países. El rigor en el urbanismo y en la ingeniería de las carreteras puede que sea algo que seriamente contribuya a reducir el número de víctimas en los accidentes de automóviles.
- En ciertas incorporaciones a carreteras desde carril lateral se incide en oblicuo en ángulo tal que los espejos retrovisores no pueden reflejar la imagen de los coches que circulan ni con la cabeza vuelta se pueda visualizar el peligro.
- La longitud del carril de aceleración en las incorporaciones a veces es tan corto que no puede servir a la función de poderse incorporar evitando riesgos de impactar o detener al auto que viene.
- Las incorporaciones por el lado rápido de las autopistas (derecho o izquierdo según cada país) deben ser los menos posibles y, cuando existan, tan prolongados para que no incordien los vehículos más lentos que se incorporan a la marcha general de la pista.
- Las glorietas de diámetro reducido hacen muy difícil visualizar la maniobra previsible del coche que ocupa la preferencia. Los autos que esperan incorporarse se ponen nerviosos porque la glorieta se satura con pocos coches y la incorporación se hace dificultosa y arriesgada. Uno de los problemas que dejan sin resolver las glorietas es el paso de peatones, ya que cuando se sitúan pasos en cebra ello detiene la evacuación de autos de la glorieta colapsándola al instante.
- El sistema de señalización horizontal cuando están en obras las vías sería eficaz si no fuera porque, a medio borrar las amarillas y deficientemente ocultadas las anteriores existentes, en muchos momentos lo que aparece es una doble señalización de carriles y desvíos que siembra el desconcierto en el conductor.
- El sistema de estacionamiento en batería debería restringirse a zonas específicas para esa función. Cuando se diseñan plazas de estacionamiento en batería en las calles, si el auto tiene una furgoneta al lado le impide visualizar si viene un vehículo circulando. La salida se realiza realmente a ciegas.
- Las salidas de los parking de edificio deberían tener garantizadas la visibilidad en su incorporación a la vía. Muchas ocasiones me encontré que había autos grandes estacionados que impedían dejar ver, obligándome a asomar al motor de mi auto casi a la aventura.
- Algunos semáforos para los peatones tardan tanto en cambiar para permitir pasar, que algunas personas pierde la paciencia y se arriesgan a cruzar en rojo.
- Me asombra que en algunas ciudades no se cuide el que la jardinería no impida la buena visibilidad de la circulación de vehículos y de las luces de los semáforos. Incluso a veces ramas de árboles tapan las señales indicadoras.
- En algunos países la señalización de rutas es tan deficiente que continuamente estás cayendo en el error. Esto origina el que el desconcierto cause inseguridad y maniobras indeseadas e inesperadas para los demás que circulan por el mismo carril.
- No puede ser que en algunas ciudades cada conductor estacione donde le venga en gana, porque impide la visión a los peatones que van a cruzar y obliga a los demás conductores a realizar maniobras con riesgo.
- Las calles estrechas con doble sentido de circulación son un anacronismo que se debería evitar reestudiando la circulación. Al cruzar los peatones, y en los cruces de esquina se complica atender la circulación en ambos sentidos.
- ¡Y el caso omiso que la generalidad hace a hablar con el celular mientras conducen!
- También, como en otros lugares, incordian quienes ocupan los carriles del centro de la autopistas aunque van despacio.